Como es tradicional en esta fechas, la Virgen de la Fuensanta ya luce sus galas de primavera y se la ha podido visitar en la Catedral hasta este martes por la tarde, día del Bando de la Huerta, ya que Los Caballeros de la Fuensanta la han bajado del Altar Mayor en el que se encontraba y, tras cambiarle las vestimentas, han colocado adornos florales a su alrededor.
En esta ocasión, la Virgen ha sido ataviada con el manto bordado en los talleres Virgen de la Amargura del Paso Blanco de Lorca. Se trata de un traje completo, ofrendado por la Corte de Damas de la Virgen de la Fuensanta con motivo de su Centenario en 2015. El conjunto está compuesto de manto y vestido de la Virgen y túnica del Niño Jesús, en los que 14 bordadoras emplearon 4 meses para realizar esta joya del bordado lorquino que enriqueció el ajuar de la Patrona de Murcia, convirtiéndose en su décimo traje de gala o bordado.
El conjunto es de raso bordado en sedas, oro y plata, y en el manto se representa el Espíritu Santo en forma de paloma y la Fuente Santa que da nombre a la Virgen, cuya agua está representada con cientos de pequeños cristales de roca.

